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Consejos ante un ataque de llanto en el bebé

Anteriormente definimoc que es un cólico y las posibles causas. Ahora descartando problemas patológicos veremos como actuar ante los cólicos del bebé.

Aunque muchos padres como última opción consideran adecuado dejar llorar al niño, esto no se recomienda ya que no mejoraría el cuadro, se deben contemplar otras opciones para tratar el cólico del niño, tales como las siguientes:

• El bebé puede tener hambre y necesitar alimento. (Tampoco se debe alimentar al niño cada vez que llore y se recomienda esperar unas tres horas entre cada toma.)
• El bebé no tiene hambre pero quizás necesite succionar (en este caso es útil proveerle de un chupete).
• El bebé necesita que le cojan en brazos.
• Puede ser que el lactante se encuentre aburrido y necesite estímulos o que por lo contrario esté cansado y necesite dormir.

También se debe intentar calmar al bebé meciéndole en la cuna, dándole un paseo en cochecito o bien con un baño tibio (para los baños se recomienda utilizar un producto infantil formulado a base de lavanda, ya que el olor de esta planta tiene propiedades relajantes).

Ante un episodio de cólicos los padres deben contemplar todas estas posibilidades y si una no da resultado, a los cinco minutos se debe pasar a la siguiente hasta lograr calmar al bebé.

Los cólicos en el bebé también se pueden deber a una forma incorrecta de alimentarlo, aquí tenemos algunos consejos de cómo alimentar al bebé para evitar los cólicos por gases.

Recomendaciones para prevenir los cólicos del niño

Para prevenir los cólicos es importante establecer una rutina diaria con las comidas, así como una rutina en el sueño del niño.

Es necesario que el niño eructe tras cada toma y que no coma  demasiado deprisa.

En estos bebés es importante conseguir un entorno tranquilo a la hora de alimentarlos.

No se recomienda usar sedantes en bebés con cólicos así como tampoco se recomienda la medicación ya que no se ha visto ningún fármaco que de resultados eficaces.

Es importante recordar que los cólicos no son el resultado de una mala actuación por parte de los padres por lo que no tiene ningún sentido experimentar sentimientos de culpa.