En ciertas épocas podemos necesitar de un extraordinario esfuerzo intelectual, estos momentos pueden deberse a un incremento de trabajo o a la preparación de exámenes y para afrontarlos del mejor modo posible es importante cuidar y mejorar la concentración, ya que esto nos permitirá rendir al máximo intelectualmente.
Glucosa para alimentar el cerebro y Aumentar la Concentración
Para optimizar nuestros recursos intelectuales y mejorar la concentración es importante estar bien alimentados y sobretodo darle a nuestro cerebro los nutrientes que éste necesita. Uno de los nutrientes más importantes para nuestro sistema nervioso central es la glucosa ya que las neuronas sólo consumen oxígeno y glucosa. Así que necesitamos comer hidratos de carbono (como frutas o zumos por ejemplo) si vamos a trabajar nuestras capacidades mentales.
Si bien este aporte nutricional es muy importante también es necesario saber que para que nuestro cerebro funcione correctamente en todos sus procesos (incluido la concentración y la memoria) necesita de unos nutrientes esenciales (sólo pueden obtenerse a través de la alimentación) y estos nutrientes son los ácidos grasos esenciales omega 3 y omega 6.
Los ácidos grasos omega 3 (EPA y DHA) los encontramos por ejemplo en el aceite de salmón, este aceite se extrae en frío y es completamente natural y es muy necesario ya que es imprescindible para el correcto desarrollo del cerebro.
Los ácidos grasos esenciales omega 6 los podemos encontrar en el aceite de borraja (una verdura muy rica en ácidos grasos) o en el aceite de onagra (éste último es más recomendado pues su composición es más segura). El omega 6 es muy importante ya que juega un papel fundamental en el buen funcionamiento de las neuronas y la liberación de neurotransmisores (sustancias que se transmiten de una neurona a otra y que intervienen en múltiples procesos fisiológicos vitales).
Si elegimos un complemento nutricional para aumentar la concentración debemos asegurarnos que contiene Omega 3 y Omega 6 aunque además puede contener otras sustancias que favorecen el funcionamiento cerebral como por ejemplo el fósforo, entre otras.