En la actualidad los estilos de vida acelerados suelen derivar en un consumo de alimentos de bajo valor nutritivo, sumados a una mala digestión por estrés, terminan en consecuencias tales como el desequilibrio del peso corporal. Sin embargo con solo observar algunas reglas simples para comer, como una correcta masticación se puede ayudar a una digestión más eficaz que estimule la natural pérdida de peso.
La mayoría de las personas mastican su comida muy rápido y lo que debemos saber es que al cerebro le toma hasta 20 minutos recibir la señal de plenitud en el estómago, período durante el cual es fácil seguir consumiendo porciones que no se necesitan. Por ello especialistas de la Universidad de Pennsylvania recomiendan masticar los alimentos 30 a 50 veces por bocado, acción que ayudará a reducir la velocidad y a mezclar bien los alimentos con la saliva para ayudar a la digestión.
Una recomendación simple es asegurarse de tragar lo que estás masticando en la boca antes de tomar otro bocado. La modificación de los tamaños de las porciones ayudará a apoyar los esfuerzos para masticar bien los alimentos más lentamente, ya que según los Centros de Prevención de Enfermedades Crónicas, se ha evaluado que la gente consume más alimentos en una sesión, si el tamaño de la porción es grande.
Por lo cual se sugiere el uso de platos más pequeños para comer menos y degustar más, así como también el control de las porciones es útil cuando no se siente cómodo dejando comida en el plato.
Otro factor que afecta al peso corporal es la distracción mientras se come, ya que puede perjudicar la digestión de la misma forma que el estrés, según investigadores de la Universidad de Minnesota.
Al masticar los alimentos entre 30 y 50 veces, estimula el comer conscientemente, situación que se traducirá en consumir menos alimentos a diario, reduciendo así el número de calorías y promoviendo por lo tanto la natural pérdida de peso.