Como muchos preparados a base de frutas, este puré está indicado en bebés que ya cuenten con los seis meses de edad, exceptuando aquellos casos en los que el pediatra haya dado una pauta distinta.
Esta receta es ideal para todo el año, dado que la fruta es una pieza básica en una buena alimentación, pero es especialmente beneficiosa proporcionársela al bebé durante el verano. Esto es porque sus requerimientos en líquidos aumentan notablemente debido al calor.
Este puré cuenta con tres frutas muy eficaces para prevenir cualquier estado de deshidratación durante los meses más calurosos. La piña y la pera son piezas muy jugosas, lo que revela en ellas un altísimo contenido en agua y sales minerales y el plátano es uno de los alimentos que más potasio contiene. El potasio, como parte de otros minerales, se pierde durante la transpiración y es importante reponer con la alimentación estas pequeñas pérdidas.
Por todo esto, al preparar este sencillo puré podemos asegurar un óptimo estado de hidratación y equilibrio mineral en nuestro bebé.
Para prepararlo únicamente necesitaremos:
- 3 rodajas de piña en su jugo (es importante que sea en el propio jugo de la piña y no en almíbar, porque estaría contraindicado en niños menores de un año)
- Medio plátano (banana)
- Media pera
El procedimiento
es muy sencillo. La piña deberá batirse primero y posteriormente colarse para
separar el jugo. Después se deberá mezclar con el plátano previamente triturado
y la pera previamente rallada.
Si la textura de la mezcla resultante es muy espesa, se le puede añadir parte
del jugo de la piña.
Finalmente, como en la mayoría de papillas, es importante utilizar la batidora
para conseguir una masa sin grumos.