La alimentación para bebés de 6 a 8 meses se caracteriza por la introducción de nuevos alimentos y de nuevas texturas en la presentación de los platos. Como norma general a partir de los 4 meses de edad se introducen nuevos alimentos para el bebé distintos a la leche materna con el objetivo de suplementar a ésta pero no de sustituirla.
Recordando que la lactancia materna puede ser continuada sin límite hasta que la madre o el bebé lo deseen también es muy importante seguir correctamente las pautas de alimentación complementaria en el período de los 6 a los 8 meses, ya que a partir del año de edad los patrones de alimentación del bebé se irán pareciendo más a los del resto de la familia adulta, por esto es importante iniciar la diversificación de alimentos para bebés en este período.
Los nuevos alimentos para el bebé que se deben introducir de los 6 a los 8 meses son las carnes como la de cordero, y si no habían sido introducidas anteriormente, también la carne de ternera y la de cerdo. En este período de tiempo también se deben introducir los cereales con gluten y las galletitas con gluten ya que el riesgo de desarrollar una celiaquía (alergia al gluten) está asociado a los primeros meses de vida, disminuyendo este riesgo a partir de los 6 meses de edad.
En este período de nueva alimentación para el bebé no únicamente es importante la introducción de nuevos alimentos sino también de nuevas texturas. Si bien al principio todos los platos se darán triturados, poco a poco, a medida que el niño vaya desarrollando su capacidad de masticación, los alimentos dejarán de triturarse completamente y la textura de los platos será más espesa hasta que la manera de comer del bebé será muy similar a la del resto de miembros de la familia.