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Versión para imprimir del artículo Alimentos buenos para la Salud Dental. No incluye formatos especiales ni imágenes.
Como punto de partida la hidratación es muy importante para su salud dental, recomendándose como saludable el consumo diario de 2 litros, además de cumplir con la higiene bucal ya que favorece el arrastre de las partículas de alimentos evitando su acumulación en la dentadura, y además estimula una mayor producción de saliva, la cual se encarga naturalmente de neutralizar los ácidos en la boca.
Entre los alimentos importantes para la salud dental se encuentra el perejil y la menta, por que cumplen una función antiséptica y refrescante, por su alto contenido en vitamina C y clorofila, dos poderosos antisépticos naturales, que además luchan contra la halitosis o mal aliento.
La cebolla contiene una gran cantidad de sustancias bactericidas y antisépticas naturales, por su alto contenido de compuestos azufrados, además de ser un antiinflamatorio natural muy potente, que actúa a nivel de las encías protegiéndolas, por ello las cebollas no deben faltar en una dieta saludable.
Cuando se mantienen a raya las bacterias de la boca, la posibilidad de desarrollar caries es mínima, por ello es importante el consumo de alimentos antisépticos como las mencionadas cebollas y el ajo, pero también los alimentos ricos en vitamina C cumplen con esta función como es el caso de guayabas, manzanas, fresas y kiwis, esta última una de las frutas con mayor contenido de la vitamina que fortalece las encías entre otras tantas funciones orgánicas.
El calcio es un mineral indispensable para la salud dental y ósea, por ello el consumo de lácteos como yogur sin azúcar, leche desgrasada, queso cotagge, etc., mantienen los niveles adecuados calcio en el torrente sanguíneo además de alcalinizar la sangre y luchar contra la acidez orgánica general.
Las semillas de sésamo para aquellos que no consumen productos de origen animal, representan verdaderas bombas de calcio biodisponible de alta calidad ideal para conservar la salud dental, ya que su contenido es casi diez veces más alto que la leche en igualdad de proporciones.
