La diabetes es una enfermedad endocrina que para su correcto control necesita un equilibrio entre dieta y ejercicio, y en el caso de la diabetes tipo I a estos factores se les debe sumar la administración de insulina.
Los diabéticos deben seguir una dieta equilibrada y estricta dónde se deben pautar unas raciones diarias de hidratos de carbono de absorción lenta (cereales integrales, pastas y alimentos farináceos) y un mucho menor de hidratos de carbono de absorción rápida (zumos, azúcares refinados y alimentos azucarados). Es el endocrino el que pauta las raciones de hidratos que debe tomar el diabético y quién a la vez, en el caso de que sea necesario, pauta la dosis de insulina necesaria en base a la cantidad de hidratos establecidos en la dieta.
Cuando no se respetan estas raciones existe facilidad para que el diabético entre en un estado de hiperglucemia (aumento de la glucosa que circula en sangre) y esto supone una descompensación de la diabetes.
La Navidad es una época en la que fácilmente se puede descontrolar una diabetes, ya que la alimentación cambia completamente. Para mantener unos correctos niveles de glucosa en sangre durante estas épocas es indispensable tener en cuenta las siguientes consideraciones:
Recordemos que la diabetes necesita un control estricto en todo momento que no puede perderse utilizando las comidas Navideñas como justificación.