El consumo de calorías después del ejercicio físico permite reponer energías después del gasto al que fue sometido, pero cuando se desea perder el exceso de peso o mantener un peso saludable, elegir alimentos como las manzanas es una de las mejores opciones nutricionales como aperitivo post-entrenamiento.
Los hidratos de carbono son una fuente de energía natural de la cual el cuerpo dispone transformándolos en glucosa, el combustible que requieren las células para obtener energía. Estos hidratos de carbono se encuentra en distintos alimentos, principalmente frutas (sacarosa) cuyos hidratos son de asimilación rápida, y granos que poseen un tipo de hidrato de carbono complejo, los cuales son utilizados lentamente por el metabolismo obteniendo así energía por más tiempo.
Una manzana mediana proporciona 25 gramos de carbohidratos totales, de los cuales 19 se componen de fructosa (azúcar de la fruta), que brinda energía de fácil acceso y que permiten una recuperación más rápida después de una sesión de entrenamiento físico extenuante.
Para recuperarse más rápido de un entrenamiento duro el cuerpo necesita energía en el corto plazo, pero además requiere de ciertos micronutrientes para favorecer los procesos metabólicos y las manzanas contienen una gran riqueza de ellos como; la vitamina C, un micronutriente esencial para construir y mantener los tejidos conectivos del cuerpo al estimular la producción de colágeno.
La vitamina C también refuerza el sistema inmunológico y una manzana mediana proporciona aproximadamente el 14 por ciento de la ingesta diaria recomendada de vitamina C para un adulto saludable.
Las manzanas contienen poco sodio o calcio naturales, pero son una buena fuente de potasio, que sumado a otros micro minerales y el agua que contiene, ayuda a la rehidratación y reposición de electrolitos perdidos en el ejercicio físico de forma inmediata, por ello las manzanas representan la mejor opción como alimento post-entrenamiento.