Los niños en edad escolar tienen unos requerimientos nutricionales muy exigentes y esto es así por varios motivos: por una parte están en una época de crecimiento y desarrollo físico, por otra parte están sometidos a un esfuerzo intelectual importante y además muchos de ellos realizan actividades extra-escolares. Con todo esto las funciones que realiza su organismo son complejas y necesitan un aporte energético adecuado y equilibrado.
En muchas ocasiones los niños en edad escolar almuerzan en el mismo centro académico y debe ser el colegio quién elabore un menú adecuado, así que en esta comida nos será difícil influir pero sí está en nuestras manos preparar adecuadamente la comida más importante del día: el desayuno.
En un desayuno equilibrado no tienen cabida
aquellos productos que dicen contener todos los nutrientes necesarios, porque
si bien esto puede ser cierto no nos ayudará a que el niño adquiera unos
hábitos de alimentación adecuados.
El desayuno debe contener proteínas, una
importante cantidad de hidratos de carbono y fruta. A continuación se
proponen dos ejemplos de desayuno idóneos para niños en edad escolar que cumplen con estos requisitos:
Con la leche aportamos suficientes proteínas, y además, en la primera opción tenemos una fuente proteica muy completa. Con el pan o los cereales aportamos el nutriente más importante que son los hidratos de carbono, preferiblemente el pan debe ser integral porque hace que se absorba más lentamente y por tanto libere energía de forma más duradera. Para aquellos niños en edad escolar que no tengan mucho apetito será más adecuado acabar el desayuno con un zumo y no con la fruta, aunque es más aconsejable la fruta ya que se obtienen más vitaminas, minerales y fibra.
En la cena es importante asegurarnos de que los niños en edad escolar van a tomar todos los nutrientes necesarios, complementando aquellos que quizás no obtengan durante el resto del día. Por tanto, debemos alternar en nuestras cenas los siguientes alimentos: