La obesidad es un estado en el que hay un exceso de grasa corporal frente a la masa no grasa. Además hay otros valores como el Índice de Masa Corporal (peso dividido por altura al cuadrado) que indican si hay sobrepeso u obesidad. Un valor en el IMC por encima de 30 indica un estado de obesidad. De todos modos si se sospecha que el niño padece sobrepeso u obesidad infantil es imprescindible que sea controlado por su pediatra.
Si existe obesidad infantil probablemente el niño no siga una dieta sana y equilibrada así que el primer peligro es que estos malos hábitos se trasladen a la edad adulta y por tanto el estado de sobrepeso u obesidad se mantenga.
Además la obesidad es un factor de riesgo para múltiples enfermedades tales como la diabetes tipo II, el colesterol, la hipertensión arterial, problemas articulares... También es un importante factor de riesgo para el desarrollo de accidentes cardio vasculares.
Los alimentos que se deben restringir en la obesidad infantil son todos aquellos con un alto contenido calórico y bajo valor nutricional y aquellos que por el modo de ser cocinados ganan notoriamente en calorías. Entre estos alimentos podemos destacar los siguientes:
Los demás alimentos deben tomarse en las proporciones adecuadas, pero para combatir la obesidad infantil sí es imprescindible restringir de modo completo estos alimentos, al menos durante una temporada y sólo en un caso necesario (cumpleaños, compromiso social, Navidades...) se podrá permitir su ingesta únicamente de manera esporádica.