Para realizar la digestión nuestro cuerpo sintetiza el compuesto más ácido que podemos encontrar en nuestro organismo, el ácido clorhídrico. El estómago cuenta con un sistema de capas interno que le permite soportar el bajo pH de este ácido.
Pero si existe alguna anomalía anatómica o fisiológica el ácido clorhídrico puede ponerse en contacto con otras partes del sistema digestivo o incluso con zonas del estómago que no están protegidas (esto se da cuando existe una ulceración).
Entonces estas zonas quedan quemadas, erosionadas y pueden llegar a sangrar provocando hemorragias internas y todos los problemas que de aquí se pueden derivar.
El síntoma principal de este cuadro clínico es la sensación de ardor, de quemazón. Esta sensación se inicia en la parte superior del abdomen pero puede ir ascendiendo. Normalmente se produce después de las comidas pero puede aparecer en cualquier otro momento del día. Esta sensación de quemazón típica de la acidez de estómago puede acompañarse de dolor, que puede ir desde una molestia leve a un dolor moderado a grave.
Cuando se padece esta sintomatología se debe acudir al médico para que él acabe de corroborar un diagnóstico u otro.
Para controlar la acidez de estómago es imprescindible tomar alimentos que contribuyan a disminuir el pH de nuestro organismo, estos alimentos como veremos a continuación pueden ser básicos (como el bicarbonato) o ácidos (como el limón), aunque algunos no se consideran de ningún extremo: