El continuo descenso de las temperaturas que precede a la estación invernal debilita a nuestro sistema de defensas (que en cambios estacionales debe adaptarse a numerosos cambios) y esto nos sitúa en riesgo para contagiarnos de una enfermedad vírica, siendo las más frecuentes en esta época la gripe y el resfriado.
Las enfermedades víricas no tienen cura sino que deben seguir su curso y una vez han aparecido los fármacos únicamente alivian los síntomas. Para prevenir llegar hasta este punto y tener que medicarnos podemos empezar por reforzar nuestro sistema inmune, una buena opción es empezar a tomar zumo de limón para unas defensas sanas, ya que si nuestro sistema de defensas se encuentra en buena forma los riesgos de padecer una de estas enfermedades disminuye notablemente.
El zumo del limón es muy conocido por las propiedades que presenta para ayudarnos a quemar la grasa corporal, pero además, esta fruta cítrica también presenta propiedades que nos ayudan a reforzar nuestro sistema inmunitario.
El zumo de limón para unas defensas sanas es adecuado por lo siguiente: