Alimentos especialmente saludables para pasar el verano
El estado de nuestro cuerpo es cambiante y sus requerimientos alimentarios varían a lo largo de las distintas estaciones ya que el cambio de clima, temperatura y luz solar supone un proceso adaptativo para el organismo.
Para facilitar este periodo de adaptación una adecuada alimentación debe suponer nuestro mayor y efectivo aliado.
Durante el verano, debido a las altas temperaturas nuestro organismo se ve predispuesto al cansancio y la deshidratación, por lo que en el transcurso de esta estación es importante alimentarse de forma ligera pero frecuentemente, incluyendo de forma abundante en nuestra dieta alimentos con alto contenido en agua.
- Sandía y melón: Estas son las frutas estrella del verano, debido a su alto contenido en agua, que puede llegar prácticamente al 90 %.
Pero no únicamente aportan agua, también vitaminas, minerales e hidratos de carbono de absorción rápida, además de tener un bajo valor calórico, entre 32 y 35 calorías por cada 100 gramos.
- Pepino: Todas las verduras y hortalizas poseen importantes cantidades de agua, no obstante, el pepino es uno de los mejores ejemplos de ello. Ideal para añadir a cualquier plato fresco o ensaladas.
- Lechuga: La lechuga también posee un altísimo porcentaje de agua en su composición, aproximadamente el 95%, además aporta otros importantes nutrientes.
Se recomienda su ingesta sobre todo a mediodía ya que durante la noche puede causar digestiones difíciles.
- Pescado: El pescado, tanto el blanco como el azul, posee muchas propiedades nutricionales beneficiosas (especialmente el azul) pero una de sus características más importantes es que se digiere mejor que la carne, por lo que nos ayudará a tener unas mejores digestiones durante esta estación.
- Gazpacho: El gazpacho andaluz es sin lugar a dudas una de las mejores bebidas durante el verano debido a que está realizada a base de agua y verduras, aportando numerosos micro nutrientes.
Incluye en tu dieta cotidiana los mejores alimentos para el verano e hidrátate de manera natural, evitando el cansancio y el malestar.